de facebook a su mesa

Fernando Aramburu me envía esta nota que Gemma Torres ha colgado en su muro de Facebook. Desde aquí, gracias a los dos.

"Una casa en Bleturge, de Isabel Bono, es un libro inquietante. Lo lees con el ánimo suspendido, temiendo que en esos personajes que son solo el padre, la madre, la hija o el hijo muerto se pose, otra vez, la tragedia. Es un libro hecho como con cuentas sueltas, como si fuera un collar, como si pudieras cambiar de sitio las perlas.

La familia se quiere, se tolera, se desprecia o se odia, de todo puede pasar y pasa en las familias. Nos gusta más cuando una familia se quiere y pregona su unión a los cuatro vientos, pero muchas veces las relaciones son tóxicas, difíciles y, sin embargo, hay que seguir viviendo con ellas. Una casa en Bleturge te lleva a reflexionar sobre estos aspectos a la vez que mantiene tu cabeza funcionando en todas las direcciones para intentar adivinar cuál será el siguiente movimiento.

Isabel Bono ganó con esta obra el "Premio de Novela Café Gijón 2016" y, en mi opinión, muy merecidamente.

Gracias Fernando Aramburu por la recomendación."

puntos suspensivos (o de cómo hacer crítica literaria vía sms)

(Cumpián en Trapobane)
El día 10 se presentaba Bleturge. El día 7 recibí un maill desde el móvil de Paco Cumpián, desde el sur de India. ¡Si esto no es el siglo 21, que me aspen!, pensé.

El mail decía lo siguiente:
7 de febrero de 2017 13:38
"Hola desde el sur de India, no podré estar en la presentación porque llego a Málaga el 11, pero leí todas las incidencias y estoy loco por leerla, te la cambio por mi Transiberiano, donde es seguro que salgo ganando con el cambio. Te llevo dos piedras una de Kandy (Sri Lanka),  y otra del sur de India. Un abrazo."

Él día 17 quedamos para intercambiar libros. Cumpián acaba de publicar Transiberiano, un preciosísimo libro con ilustraciones de Mavi Herrero, en la editorial "Luces de Gálibo".

Me cuenta que además de en Sri Lanka y la India, estuvo con su hija Bárbara en Chaouen, que allí escribieron un cuento entre los dos. Yo no tenía ni idea de esto, y Cumpián no sabe que el Bleturge que le llevo dedicado desde casa, dice: "Para Paco Cumpián y Bárbara: Un libro entre dos no es medio libro para cada uno". La casualidad nos guía, pienso.

La noche siguiente llega un sms:
18/02/2017 23:13
"Empecé tu libro y no paré hasta que lo acabé. Son muchas cosas las que tendría que decirte, por aquí es imposible. Hay ciertas cosas parecidas al Transiberiano, su expresión casi cinematográfica, son escenas, enfoques de una cámara. Luego sostienes el hilo argumental con alfileres y aunque se ve con una cámara un poco desenfocada, consigues llegar al final y soltar la carga, soltar el mensaje, el sentimiento, la finalidad, y me resulta curioso tu decisión con los guiones, cuando el personaje habla..."

Al rato llega otro:
18/02/2017 23:50
"y creo que tanto tu discurso como el mío, están en el fijo de la cuchilla de afeitar. Los argumentos que los sostienen, son los mismos que pueden destruirlo, y sin discusiones, evidentemente. Cosa curiosa la nuestra..."

Y no sé si estos últimos puntos suspensivos significan que habrá otro sms o será esa extraña costumbre de los hombres, de no terminar nunca las frases.

Y aquí estoy, esperando.

socio, busca un socio

(Carnets raros)
Hace mil años, porque todo en mí sucedió hace mil años, estando yo en Vigo, descubrí en TVG el Club Xabarín. Quise hacerme socia ("socio busca un socio", cantaban) muchas veces, pero no admitían mayores de edad. Este año volví a intentarlo: nada.

No sé el porqué, porque nunca me he sentido parte de un grupo de más de dos, pero desde niña arrastro el tic de coleccionar carnets. Aún conservo el carnet del Club Milkibar. Otros clubs llegué a inventarlos, como La Brigada Antipantys.

En fin. Tengo el cedé doble del Club Xabarín, lo he pasado a mp3 y suelo escucharlo habitualmente. Las palabras "¿Hay alguien ahí?, ¿hay alguien ahí?, ¿sí?, ¿no?, ¿sí?", se me han aparecido hoy mientras cambiaba la cama.

Estoy recibiendo mails de amigas, de amigos, hablándome bien de Bleturge. Yo feliz, claro. Pero, cuánto me gustaría que personas que no me hayan visto nunca en 3D me dijeran algo.

¿Hace?

infinito menos uno

(Mil años atrás, una felicidad de infinito)
Según mi abuela (y según el día), yo era reinamora o viejachica. Quizá por eso siempre comprendí el concepto "infinito" (por viejachica, no por reinamora). Lo que no me cabía en la cabeza era el término "infinito menos uno".

Cuando el pasado viernes me preguntaron qué siento al tener una primera novela publicada, me acordé de mi amigo el poeta Antonio Muñoz Quintana, de su voz de confesor, diciéndome: "Bono, escribe novela, Bono...".

Siento una alegría de risa floja que a veces se me escapa mientras sacudo el mantel o tiendo ropa. Eso siento, una alegría de sábanas al sol en un día nublado. Y pienso en que Antonio me falta para una alegría de sábanas al sol, una alegría de infinito. Infinito menos uno era esto: cuando te pasa algo muy bueno y tuamigo tuhermano tuamor, esa persona que confiaba más que tú en ti, no está contigo para alegrarse.

gracias por no temer a la lluvia

(Esto es una cola de firmas en condiciones. ¡Gracias!)
Dicen que nadie es profeta en su tierra. Vocación de profeta nunca he tenido, pero anoche, a pesar de la lluvia, esa lluvia que paraliza a los malagueños y desordena las calles como si las calles tuvieran fiebre, a pesar de apetecer más una mesa camilla y, quizá, un polígrafo de lux, la sala Oyarzábal de la Diputación de Málaga estaba hasta arriba. Un poco más de amor, y revienta.

presentación en málaga


El próximo viernes 10 de febrero, a las 20h, presentaremos Una casa en Bleturge (Siruela, 2017) en Málaga. Será en la Sala Oyarzábal (Pza. de la Marina, 4). Las palabras bonitas las pondrá Javier La Beira Strani. Yo, haré lo que pueda. ¡Nos vemos!

línea de fuga

Qué bonito cuando alguien te mira y te ve.
http://www.diariosur.es/opinion/201701/29/lupa-navaja-20170129005423-v.html

librújula

Enrique Villagrasa escribe sobre Bleturge. A veces firma "Enrique V", como si fuera un rey. A sus pies, majestad.
http://www.librujula.com/criticas/1745-isabel-bono-una-casa-en-bleturge-critica

déjate de rosas

Fernando Aramburu deja por un momento a su Alma dormida sobre un cojín para escribir cosas bonitas sobre Bleturge. ¡Vivan los cactus!
http://fernandoaramburu.blogspot.com.es/2017/01/sobre-una-novela-de-isabel-bono.html

evolución

(La evolución de la especie Bono)
No mentí cuando Juan Carlos Morales, en "El ojo crítico" de RNE, me preguntó qué libro me había influido más para querer ser escritora. En menos de 30 segundos me vino una imagen:

-¿A dónde vamos?
-Al circo, al zoo, al campo.

El libro Juguemos con los Picotes de Ana María Pelegrín siempre fue mi libro favorito, aquel libro disparó sin retroceso mi imaginación. Después vendrían La tía Tula para encogerme el corazón, Sábato para darme la mano y ayudarme a bajar a mi semisótano particular, Henry Miller para abrirme los ojos y las piernas, y Samuel Beckett. Con Beckett acabó cierta inocencia, supongo.

Es posible que mis dos frases favoritas de toda la historia de la Literatura sean: "Al circo, al zoo, al campo"; y esta otra que resume a la perfección lo que es escribir y con la que termina Molloy: "Entonces entré en casa y escribí, es medianoche. La lluvia azota los cristales. No era medianoche. No llovía."

la esfinge maragata

(Con Monserrat López Moro, Mercedes Monmany y Ofelia Grande de Andrés)

Yo tenía fama de quedarme mucho rato pensativa. Una vez hasta me llevaron al médico. Don Juan, que tenía una casa parecida a la de la Familia Monster y un despacho que olía a resina, me preguntó si no prefería saltar al elástico con otras niñas a quedarme en casa escrutando la cal de la pared. No te encierres para hacer puzzles, decía, ¡muévete!

Mi madre, cuando me ponía en "modo infinito", me llamaba "esfinge maragata". Siempre me gustó. 

Dedico pues este vídeo a nuestro médico de cabecera, Don Juan Moreno Casasola, para que vea que sus consejos no cayeron en saco roto.

(Gracias a Javier Velasco Oliaga, por retratarme como soy: hablando más con las manos que por los codos), 

http://www.todoliteratura.es/noticia/11860/presentaciones/llega-la-puesta-de-largo-de-una-casa-en-bleturge-de-isabel-bono.html

making off

(Antes: Rápido que me caigo!)

(Después: Si es que soy la serenidad en persona!)

Cuando veáis fotos de alguien en modo "divina de la muerte" en papel couché, no envidiéis su prestancia y saber estar. La magia la ponen ellos, los fotógrafos, que consiguen que no parezca que te estás chorrando de una silla inestable de hierro muy fría. Mañana cistitis, pero hoy, ¡oh, cómo brillo!